Las bicicletas son para el verano

Las bicicletas son para el verano

Con la representación de esta obra escrita por Fernando Fernán Gómez se conmemora el 40 aniversario del Centro Cultural de la Villa que lleva su nombre desde el año 2007. Se trata de un nuevo montaje de Las bicicletas son para el verano, la más famosa del dramaturgo, actor y director de origen argentino. El ganador del Premio Lope de Vega en 1977 estrenó por primera vez esta obra, con dirección de José Carlos Plaza, un 24 de abril de 1982 en el Teatro Español de Madrid. Tras su éxito de crítica y público el montaje se trasladó al Centro Cultural de la Villa donde permaneció cerca de tres meses. El motivo de su reposición en el teatro Fernán Gómez, hasta el próximo 30 de abril, es la celebración de la de las cuatro décadas que cumple este espacio ubicado en la plaza de Colón y que fue inaugurado en 1977.
 

La obra cuenta la historia de una familia de clase media madrileña durante la guerra civil. Formada por don Luis, su esposa Dolores y sus hijos, Manolita y Luisito, comparten la cotidianidad de la guerra con la criada y los vecinos del edificio. Luisito, a pesar de haber sido suspendido, quiere que su padre le compre una bicicleta. Pero la situación va a obligar a postergar la compra. Y el retraso, como la propia guerra, durará mucho más de lo esperado.
 

César Oliva dirige este montaje, que cuenta con Llum Barrera y Patxi Freytez como cabezas de un reparto que completan Esperanza Elipe, Álvaro Fontalba, Teresa Ases, Agustín Otón, María Beresaluze, Adrián Labrador, Ana Caso y Lola Escribano. Oliva firma también la adaptación del texto que ha sintetizado y reducido tanto el número de personajes, dejándolo solo en once intérpretes, como su duración.

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