La dramaturgia arranca con la muerte de Androgeo en su lucha con el toro de Maratón, incitado por Egeo, rey de Atenas. Esta muerte provoca la declaración de la guerra por parte de Minos, rey de Creta y padre de Androgeo. Poseidón ayuda a Minos a vencer en la batalla y, en compensación le exige que sacrifique el primer ser que surja del mar. Surge un hermoso toro blanco, pero Minos trata de engañar a Poseidón y no sacrifica al bello animal. En venganza, el dios del mar hace que el toro blanco preñe a Pasífae, esposa de Minos, la cual parirá un monstruo: el Minotauro, que será encerrado en un laberinto y alimentado con carne de vírgenes atenienses. La aparición en Creta de Teseo, hijo de Egeo, culminará como venganza con la muerte del Minotauro.  La lucha por el poder, el amor como moneda de cambio, serán ingredientes que muevan a los personajes a lo largo de la obra.